Diálogo de Voces se basa en la idea de que estamos formados por múltiples energías, subpersonalidades o “yoes”.
Estas sub-personalidades, de las que puede haber multitud en cada persona, se van formando desde la primera infancia para proteger la vulnerabilidad del niño. Se las distinguen en dos tipos: los Yoes Primarios y los Yoes Renegados, por ejemplo, el Complaciente, el Controlador/Protector, el Crítico, el Empujador o el Perfeccionista, etc..
Durante la sesión con el facilitador se establece un diálogo con estos diferentes yoes. Para ello, en una sesión el Facilitador habla primero con el cliente para saber cuál es la problemática que trae para explorar. A partir de ahí todo está abierto, siempre es sorprendente: cuando el facilitador se percata de que cierta faceta o energía en su cliente es prominente ( Gestalt) le/la invita a buscar un lugar en el espacio donde esta faceta o energía se siente a gusto, confortable, en su sitio. Pueda ser cerca, o bien en otra esquina de la habitación, en un rincón, hasta de pie sobre la mesa!. El facilitador se relaciona con esta parte de la personalidad de su cliente como si fuera un individuo, la toma en serio, intenta indagar en el papel que esta desempeña en la vida de su cliente, hasta que la energía se va desvaneciendo para dar lugar a otra calidad diferente, que buscará otro lugar en el espacio. A veces se regresa al punto de partida del ego, pero después de algunas sesiones, cuando el cliente ya se ha familiarizado con el modo de trabajar en Dialogo de Voces, se desplaza en busca de otro lugar en la habitación.
Voice Dialogue, Diálogo de Voces, es un método desarrollado por una pareja de psicólogos, Hal Stone y Sidra Winkelmann, que integra los conocimientos de C.G. Jung, el psicodrama, Gestalt, Virginia Satir, y otras influencias.
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